martes, 29 de enero de 2008
me muestro y alguien mira
helado de dulce de leche y limón.
agua tónica.
frazadas que no pesen.
la mañana del domingo.
su abrazo.
mi cara de mañana, uno de esos extraños días en los que duermo más largo.
el limay.
la ciudad y los pueblos.
esa manito en mi mano que parece grande.
viento-mar-los pies en la arena.
nuestras charlas de la noche a día.
cinematear.
creer pase lo que pase.
las cerezas.
el olor del jazmín y de las lilas.
el recuerdo de nosotros niños en el patio de casa.
yo en sus ojos.
mirar por la ventana cocinas ajenas.
estar ahí.
crash
al instante pensé que el lenguaje científico atrasa.
30 años no es tanto en un promedio de vida de 80. sin embargo, hablamos hace varios días y sigo pensando en los fetos valiosos.
cuánto deseo.
cuánta naturaleza.
cuánta presión.
cumplí 33 hace pocos días y no lo había pensado.
domingo, 27 de enero de 2008
ojos
le da miedo la casa sola con ella en la casa.
hoy el gato que mira está pensando en irse
porque a él tampoco le gusta tanta soledad.
jueves, 24 de enero de 2008
almigas
para las cosas buenas y para las cosas malas,
hay gente que necesito cerca.
son mis otras almas que andan por allí.
muchas saben cuando las invoco. Otras no.
sin embargo,
todas
misteriosamente
aparecen justito.
estos lazos son, en mi mundo, finísimos hilos de seda, que resisten cualquier vendaval.
cerca no es cerca. no es distancia.
cerca es el abrazo de la voz.
martes, 22 de enero de 2008
columnas
parecemos cansadas.
hay gente que quiero en esa foto.
tenemos pocos años,
sonreímos.
Deber cumplido?
estamos convencidas?
me gusta estar en la foto.
aunque tengamos los ojos hinchados y cierto-aire-triste sobrevuele.
sábado, 12 de enero de 2008
engañapichanga
me mata internet.
puedo wuevear horas al ritmo de mi cabeza.
busco busco busco encuentro me distraigo busco busco me encuentro pierdo horas
por eso decidí escribir
para que me den las ganas de ponerme a laburar.
pienso en que este currito me compra la compu y me pone contenta.
ja
boba yo.
estoy en un punto que no me gusta nada
otro día te cuento.
yohoy
Hace horas que intento concentrarme.
Me desespera ver mis muuuuchos trabajos todos en el mismo punto: cero.
Estoy en cualquier lado: en su viaje, en la compu nueva, en el mail que no contesté porque no quise, en la tarde en la obra, en las ganas de irme a dormir.
Será posible… el mate se enfrió otra vez.
Por suerte, de entre todas las cosas de mi escritorio surgen las parejitas bolivianas con su ademán de baile y el deseo de escribir.